9 días Sri Lanka: Anuradhapura - Mihintale - Sigiriya - Pidurangala - Polonnaruwa

Con este post empiezo a detallaros lo que hicimos cada uno de los 9 días en Sri Lanka. En esta entrada os contare lo que hicimos los días 1, 2 y 3.

Recordaros que toda la información práctica para organizar el viaje (hoteles, vacunas, visado, etc.) lo podéis consultar en esta entrada. 

 

Día 1: Aeropuerto- Negombo- Anuradhapura

Llegamos alrededor de las 9 de la mañana al aeropuerto de Sri Lanka, y tras cumplimentar los trámites en control de pasaportes, pasamos por la famosa zona llena de lavadoras y desde ahí ya salimos en busca de nuestro conductor.

Este día ya que estábamos bastante cansados, después de 2 días entre aviones y escala, decimos poner rumbo a Anuradhapura, parando antes en Negombo a cambiar dinero.

En Negombo el chofer nos llevó al secadero de pescado, para ser lo primero que vimos de Sri Lanka, he decir que nos impactó mucho, esa mezcla de olor a pescado, junto con moscas, cuervos y perros callejeros y a la vez vera la gente trabajando duramente para sacar el pescado y luego venderlo… es una imagen de esas que se graban.

Después nos llevó también a la parte del rio y el puente donde los pescadores se tiran horas intentando que los peces piquen.

Y aquí no acababa todo, fuimos a una gasolinera (algo que puede parecer normal), pero allí nos contó que el país estaba sufriendo la falta de gasolina (solo había diésel), así que durante los días próximos fuimos viendo largas colas de gente intentando conseguir gasolina, incluido nuestro conductor.

Tras cambiar el dinero en una joyería de Negombo ya pusimos rumbo a Anuradhapura, tardaríamos en llegar unas 3 horas y media, con un parada para tomar cocos y otra parada para comer. Durante el trayecto pudimos observar lo verde que era todo y como había cientos de puestos a los lados de la carretera donde la gente vendía frutas, arroz, productos hechos a mano por las mujeres como manteles etc. Y también dormimos porque estábamos muy cansados, todo sea dicho!

Durante el camino también nos llovió bastante (el viaje empezaba pasado por agua) y cuando llegamos al sitio para comer caía un diluvio increíble. Comimos en un hostal donde también ofrecían comidas, con unas vistas muy bonitas hacia el lago y Mihintale (aunque con la lluvia no se apreciaba tan bien). 

Desde allí pusimos rumbo al hotel, porque no tenía mucha pinta de que el tiempo mejorase y era mejor intentar visitar las ruinas al día siguiente por la mañana. La llegada al hotel también fue complicada, ya que el hotel estaba muy alejado y debido a las lluvias el camino era complicado para conducir, pero finalmente llegamos y aprovechamos para descansar un rato, y en el único parón de lluvia bajamos a la piscina.

Cenamos prontito en el hotel y a dormir.

Como veis este día fue más de tránsito hacia el triángulo cultural.

Dia 2: Anuradhapura – Mihintale-  Habarana

Nos levantamos temprano y a las 7 de la mañana ya estábamos rumbo a Anuradhapura.

Empezamos la visita por Isurumuniya Temple, cuya entrada era de 200 rps/persona. 

Y como llegamos tan pronto prácticamente éramos las únicas personas en el recinto. Nos gustó mucho y nos parece una opción genial para empezar.

El templo nos encantó especialmente la cueva donde está la imagen de buda. Desde allí nos dirigimos al siguiente punto , el templo budista Yaya Sri Maha Bodi, gratis de visitar, y donde tuvimos la suerte de ver como estaban preparando todo para la celebración y pudimos ver a muchas familias llevando sus ofrendas a buda.

Andando nos fuimos al templo Ruwanwelisaya Dagaba, también gratuito, y súper impactante ya que ver aún más si cabe el fervor de la gente en su creencia en buda. Fue muy especial este sitio.

Cuando terminamos la visita el conductor nos preguntó si queríamos continuar en Anuradhapura (ya con la entrada de pago para el resto del recinto) o si por el contrario queríamos ir a Mihintale, y pusimos rumbo a Mihintale, ya que veíamos excesivo el precio de la entrada del resto de recinto.

Mihintale, se conoce como el sitio donde empezó el budismo en Sri Lanka, se trata de un monte al que a través de unas escaleras se accede a la parte alta del monte donde hay varios templos e imágenes de buda. El sitio es espectacular y tiene unas vistas impresionantes de toda la selva de Sri Lanka. Eso sí, justo ahí empezó a hacer un calor que costaba subir! La entrada cuesta 500 rupias/ persona. Por cierto a buda no se le debe dar la espalda, asi que no hagáis como yo en una foto que no me di cuenta.

Después comimos camino a Habarana, y luego hicimos una cosa chulísima que fue montar en elefante al lado de la Lion Rock. Es cierto que en Sri Lanka los sitios que vimos donde se podía montar en elefante (llevan cadenas) y no vimos sitios donde estén 100% en libertad y puedas montar en ellos. He decir que impresiona bastante al montarte pero merece la pena! Y como veis no hizo falta ir al rio con elefante porque nos cayó el diluvio directamente!

Día 3: Pidurangala- Polonnaruwa- Habarana (noche)

El día se preveía intenso y así fue! Cuando estuvimos organizando el viaje, teníamos la duda de si subir a la Roca del león o a Pidurangala, hubo varias cosas que al final nos hicieron decidirnos por Pidurangala, una es la diferencia de precio de $30 La roca o de 500 rupias/persona Pidurangala (en € serían unos 2,6€/persona) y la segunda es que desde Pidurangala se ve la roca del león.

 Es cierto que la subida tiene un tramo final que requiere un poco más de habilidad ya que hay que “trepar” por unas rocas, pero si otras personas lo hacían creíamos que nosotros también podíamos y así fue! Eso sí para mí fue una subida dura, porque con el calor y la humedad, hubo un rato que me faltaba el aire.

Una vez arriba aprovechamos para descansar y por supuesto para disfrutar del paisaje y del entorno. Las vistas son impresionantes, y en un día más claro que el que tuvimos nosotros tiene que ser aún más espectacular, eso sí con más calor también!

Nos encantó ver como en mitad de la selva se levantaba impresionante la roca del león. La verdad que si los días os lo permiten creo que subir a las 2 rocas merece la pena, sino tendréis que elegir, pero os aseguro que Pidurangala no os decepcionara.

  

Cuando bajamos, visitamos el pequeño templo budista que hay cerca de la entrada.

Como os comente, Sri Lanka sufrió un problema de falta de gasolina, y este tercer día ya empezamos a notar que nuestro chofer por más que intentaba no encontraba. Durante el rato que estuvimos en Pidurangala se fue en busca de gasolina, aunque sin éxito.

Desde Pidurangala nos fuimos hacia Polonnaruwa. Por el camino nos encontramos con elefantes en libertad andando tranquilamente por el arcén.

Polonnaruwa tiene mucho para ver, ya que fue la antigua capital, y actualmente todo el complejo está reconocido como patrimonio de la humanidad. La entrada se saca en el museo, donde puedes ver algunas piezas, tallas y esculturas así como maquetas sobre cómo era la ciudad antiguamente. 

El precio de la entrada de Polonnaruwa es de $25/ persona o su equivalente en rupias en nuestro caso en ese momento estaba a 3.870 rupias/persona.

Para visitarlo es imposible hacerlo andando, así que puedes alquilar bicis (no vimos tuk tuk dentro del recinto), o si vas con coche puedes visitarlo así también. Nosotros lo hicimos así, y la mayoría de la gente que vimos iban también con su conductor.

Con la entrada tienes acceso a distintos puntos que son imprescindibles, tienes que enseñar la entrada en esos sitios, y a parte puedes visitar otras construcciones (estupas, templos, budas etc.).

Os dejo fotos para que veáis lo impresionante que es.

Aquí creo que el conductor nos asesoró regular, porque después de Pidurangala teníamos que haber comido en ruta y luego ya haber visitado Polonaruwa, pero lo hicimos todo seguido, y la verdad es que eran casi las 3 de la tarde y ya teníamos un hambre increíble, y es cierto que la última parte de Polonoruwa a mi se me hizo muy pesada porque necesita comer algo que no fueran galletas o snacks. Asi que tenedlo en cuenta si hacéis esta etapa parecida a la nuestra.

Comimos en un sitio que nos gustó muchísimo, nos llevó el conductor, se llama Ariya Rest House Polonnaruwa, el negocio lo llevaba una chica y para ella trabajaban algunas mujeres, que eran las que preparaban la comida. Era genial porque nos iban explicando cada plato, y nos decían “muy spicy” “super spicy” “no spicy”, para que no muriéramos de picante jaja Fueron súper amables y el sitio aunque era súper humilde el trato fue genial y la comida riquísima.

Cuando terminamos de comer a eso de las 4 y pico, volvimos hacia Habarana, la idea era haber hecho un safari, pero en tiempo era imposible, para eso teníamos que haber estado a las 2 de la tarde listos para hacer el safari, ósea que teníamos que haber madrugado mucho más para subir la roca, o dedicar menos tiempo a Pidurangala y Polonaruwa. Pero lo suyo seria hacer un safari en alguna de estas etapas del triángulo cultural.

Y hasta aquí el "resumen" de los tres primeros días en Sri Lanka. Espero que os ayude y os guste!