Nuestra boda en Segovia con toques tradicionales y rurales - Parte II-

Continúo con la segunda y última parte de nuestra boda, donde os cuento todo lo que hicimos en el cocktail, banquete, fiesta y os enseño algunas fotos de nuestro reportaje de novios. Todas las fotos que os enseño están hechas por Esif Fotografia.


La parte primera con los preparativos y ceremonia la podéis visitar aquí.

Reportaje de novios

Para el reportaje nos apetecía mucho hacernos las fotos en el campo, más que en lugares emblemáticos de la ciudad, así que hicimos unas fotos en el Claustro de la Catedral mientras los invitados salían a esperarnos, y la verdad que nos alegramos mucho de haber decidido añadir el hacernos fotos aquí junto con las del campo.

Después continuamos la sesión en los alrededores de la Finca de Duque en Sotosalbos (Segovia), que fue la finca que elegimos para la celebración y que ahora os contare con más detalle.

Durante el reportaje lo pasamos súper bien, y de hecho se nos pasó tan rápido que cuando nos dimos cuenta de la hora teníamos ya que ir a la finca que teníamos allí a los invitados esperando.

Además como os comentaba en el post anterior, Luis, amigo íntimo de la familia de Carlos hizo de conductor, así que en el reportaje se dedicó a hacernos fotos con el móvil, a gastar bromas a las fotógrafas, a mi… así que fue genial!

Finca para la celebración - Finca de Duque (Sotosalbos, Segovia)

Teníamos claro que queríamos una finca para celebrar la boda, el hecho de ser en verano invitaba aún más a celebrarlo en el campo.

Visitamos algunas fincas antes, pero finalmente cuando visitamos la Finca de Duque ya no seguimos mirando, cumplía todos nuestros requisitos.

• La finca esta cuidadisima y el entorno es precioso. Además tiene varios espacios, lo que nos pareció genial para así no tener a los invitados todo el rato en el mismo lugar. El cocktail es fuera, la comida es un salón completamente diáfano techado, y la fiesta es en otra casita con jardín alrededor.
• La cercanía con Segovia (20 minutos en coche)
• La finca no tiene canon de alquiler  y además no teníamos ninguna restricción de número invitados y podíamos celebrarlo con una boda de comida (algo que en época de muchas bodas con 150 invitados hay sitios donde no te dejan porque les parecen pocos invitados)
•  Es finca con restaurante propio y cocinas propias allí mismo, de modo que no necesitábamos un catering externo, además de la alta calidad de la comida que ofrecen, ya que Duque es sinónimo de tradición y calidad.
• Nos dejaban personalizar tanto la decoración de la finca como adaptar/ajustar los menús a nuestro gusto y las especialidades de invitados (alergias, preferencias etc.)
• Además la comunicación siempre fue muy buena y súper fluida algo básico para nosotros al estar fuera. Teresa y Miguel nos ayudaron en todo, nos pusieron todo facilidades y estuvieron súper pendientes tanto antes como el día de la boda para que todo saliera perfecto.

Decoración de la Finca de Duque

Para la decoración de la finca mi padre y la madre de Carlos fueron los encargados de ayudarnos, y luego Teresa fue la que organizo la decoración de la finca, colocando todo lo que habíamos llevado nosotros más lo que ella añadió para que quedara aún mejor. Queríamos una decoración rural a juego con el entorno, así que no faltaron objetos tradicionales, pacas de paja y flores.

Queríamos unas letras con nuestras iniciales, pero nos hacia ilusión que no fueran las tradicionales solo blancas de porexpan, así que mi padre nos hizo a mano las letras en madera y las pinto con motivos florales y campestres. 

Mi padre también nos pintó el palet para dar la bienvenida y como teníamos invitados internacionales queríamos que el mensaje estuviera en español e inglés.

En esta rincón de bienvenida, Teresa coloco los bancos, junto con las cajitas con los cubre tacones que dimos para las invitadas, las cajitas también las pinto mi padre.

Además pusimos unas cantaras de leche pintadas a mano por la madre de Carlos y una ovejita de porexpan, que dio mucho juego! Luego las movimos del cocktail a la zona de la fiesta.

Además había una zona preciosa con un espejo que gusto mucho especialmente a las invitadas, y unos banderines de just married que compramos en Glasgow.

El sitting plan lo diseñamos entre Carlos y yo, y como nos gusta mucho el cine, y las series, lo hicimos con esa temática, pero con la particularidad de que no solo tenían que gustarnos a nosotros sino que esas películas o series tenían que tener relación con los invitados de la mesa, algo que nos costó pero al final lo conseguimos! Y por ese motivo cada mesa llevaba junto con el nombre de la mesa, y la lista de invitados, una frase personalizada para los miembros de la mesa.

El sitting plan iba colgado en un palet en la zona del cocktail y luego dentro del salón, colgado con pinzas en unos árboles secos.

De la decoración de las mesas se encargó la madre de Carlos, ella recolecto todas las flores y plantas, y nosotros le ayudamos a colocar los lazos y cuerdas en los botes de cristal.

Como veis todo muy personal, familiar y hecho a mano!

Música para el cocktail, banquete, fiesta y candy bar

Para la música contamos con Producciones Llorente de Segovia, Mario su director, es amigo de Carlos del equipo de futbol, así que el trato no pudo ser mejor. Nos puso muchísimas facilidades y organizamos todo genial con él. 

Además se encargaron también del candy bar para el baile y de montarnos nuestra lona para el photocall, que encargamos en Aliexpress.

Se encargaron de ponernos música de ambiente tanto en el cocktail como en la comida, y luego con el DJ organizamos también las sorpresas que íbamos a ir haciendo durante el banquete, y por supuesto de la música del baile.

 

Cocktail

El cocktail, fue un cocktail ligero, porque la comida era muy abundante y por lo que dijeron los invitados hicimos bien, porque salieron llenísimos de la boda, que no se diga que no se come bien en Segovia!

Aquí aprovechamos para hacernos algunas fotos de grupo con los familiares y amigos.

Banquete

Al banquete entramos al ritmo de Despacito, la canción por excelencia del año pasado, la elegimos porque era muy veraniega y además todo el mundo se la sabia desde niños a mayores.

En nuestra mesa que estaba relacionada con la película de UP, el hermano de Carlos nos preparó una sorpresa y en la mesa estaban los novios de Playmobil.

Pero esa no fue la única sorpresa, cuando empezaron a servir los entrantes a nuestra mesa llegaron unas hamburguesas y patatas de McDonalds, jajaja broma de los amigos de Carlos!

El menú del banquete fue ensalada de queso a la plancha con crujiente de jamón y langostinos, merluza en suffle con salsa de gambas, sorbete de limon, cochinillo asado y milhojas de crema con tulipa de helado.

Y durante la comida hicimos varios parones, uno para dar nosotros un pequeño discurso en inglés y español de agradecimiento a nuestras familias por habernos ayudado con toda la organización y a todos los invitados.

En Segovia lo más típico es partir el cochinillo con el plato y después lanzarlo contra el suelo para que se rompa, así que cumplimos con la tradición que además sorprendió a nuestros invitados internacionales ya que nunca lo habían visto. Y mientras partimos el cochinillo sonaba Juego de Tronos, como fans de la serie!

Junto con la tarta, servimos cava, regalo de un amigo de mi padre, donde además nos personalizaron las botellas con nuestros nombres y fechas! Un detalle precioso!

Y para la entrega de ramos, utilizamos 3 canciones diferentes para cada una de nuestras amigas,

A nuestra amiga Elena a ritmo de Amigos para siempre, de los Manolos, que además ella es andaluza.

A nuestra amiga Carmen, a la que conocemos desde que vivimos en Escocia, le dimos el ramo a ritmo de Pretty Woman.

  

Y a nuestra amiga Cristina con Single Ladies, aunque en realidad a Cris el ramo se lo dio Carlos!

A los invitados les regalamos algo también bastante artesanal y casero.

La madre de Carlos hizo mermelada de mora para los 150 invitados, así que cada invitado tenía un tarro de mermelada, con una pegatina diseñada por Carlos que ponía "Para empezar bien el día unta mermelada por las dos caras de la tostada" y un trapito de tela que hicieron la madre y la tía de Carlos.

Además las chicas tenían unos posavasos de cristal y los chicos una botellita de ron, ginebra … y todo eso iba en bolsitas de papel kraf que compramos en Aliexpress, con un sello que diseño Carlos, donde se veian nuestros nombres, la fecha y el # de la boda #weeweddingeyc y que encargamos en Quilez Stamps, cerradas con una pinza de colores y para distinguirlo Carlos diseño también nuestras caras en formato comic y así las de chica llevaban mi cara y las de chico la suya! 

Ah! Para que los invitados pudieran llevarse el regalo más cómodamente que con una bolsa de papel kraf dentro metimos una bolsa normal de plástico blanca que además aguantaba mejor el peso.

Un regalo original, y que nos dijeron que encanto, especialmente la mermelada que voló en cuanto llego a cada casa!

Fiesta

Cuando terminamos de comer, ya nos fuimos a celebrar la fiesta, donde abrimos el baile con la canción de la Bella y la Bestia, la version inglesa de Ariana Grande . Primero bailamos Carlos y yo, luego se unieron nuestros padres.

Cuando finalizamos de bailar, teníamos preparado un flashmob con nuestros amigos, así que empezó a sonar una canción escocesa y todos formamos dos filas, una de chicos y una de chicas, donde Carlos y yo íbamos bailando con todos ellos y ellos nos iban animando y dando palmas. Fue muy divertido, un guiño a Escocia que es donde vivimos ahora, y al final se sumaron mas invitados a bailar.

Para la fiesta montamos dos espacios, uno interior donde estaba la barra libre, el DJ, el candy bar y el photocall donde teníamos un fotomaton y libro de firmas. Y una parte exterior donde junto con mesas estaban las letras E y C para que la gente pudiera hacerse fotos ahí también.


Del fotomaton y el libro de firmas se encargo el Equipo de Esif Fotografía y de la música y el candy bar Producciones Llorente como os comentaba al principio del post.

Para el fotomaton teníamos attrezzo que llevaba el equipo de Esif, y luego mi padre nos hizo aparte unas monteras de Segovianos, unas raquetas de padel, unos copas gigantes todo en cartón pluma, y dieron muchísimo juego.

Lo pasamos muy bien, acabamos saltando, volando por los aires y bailando y riendo muchísimo con los invitados.

Y así terminamos la boda en la Finca, pero para los que quisieron seguir teníamos autobuses contratados con la empresa La Sepulvedana, que les traslado hasta Mandala (en Segovia capital) donde continuamos la fiesta!

Muchísimas gracias a nuestras familias, a nuestros amigos por acompañarnos en un día tan especial. 

Brindamos por vosotros!