Sigo actualizando el blog con artículos de escapadas que hicimos por Escocia entre 2019 y 2020, y hoy comparto una excursión que hicimos en Julio de 2019, a la isla de Inchconnachan, más conocida como la isla de los canguros, wallaby island, y todo debido a que en la isla viven wallabies australianos.
La isla se
encuentra en el Loch Lomond, y solo es accesible en embarcación privada o como
hicimos nosotros alquilando unos kayaks en Lush y remando hasta allí.
La ida me pareció idílica, la vuelta yo lo pase un poco mal en el kayak, porque no nos olvidemos que por mucho calor que haga el agua esta helada, y con el viendo y las olas (si, aquí los lagos tienen olas), me iba dando todo el agua de frente y encima no veía que avanzáramos. Así que la experiencia aunque muy divertida a mi me mato un poco a la vuelta.
El alquiler de kayak lo hicimos con la empresa Loch Lomond Leisure, los alquilamos para 4 horas, y el precio fue de £110 los dos kayaks dobles (ósea £55 pareja) ya que como siempre fuimos con nuestros amigos de Lovely Scotland.
Una vez que tienes los kayaks, ellos te indican que isla es Inchconnachan, ya que hay muchas, aunque obviamente puedes explorar otras, pero recuerda consultar antes si son accesibles para el turismo.
Una vez en la
isla, dejamos los kayak en la orilla y nos fuimos a explorar la isla.
La isla es una auténtica maravilla, naturaleza en estado puro. Y ofrece unas vistas de Loch Lomond desde el bosque impresionantes.
Lo mejor de todo, fue que cuando nos empezamos a meter en medio de la isla donde la maleza estaba mas alta, vimos a un wallabi! Y nos dio tiempo a captar la foto, la calidad es la que es, pero creo que se aprecia perfectamente. Objetivo conseguido!
Le vimos de hecho
una segunda vez pero sin tanta suerte de poder hacer una foto.
Nosotros dimos
prácticamente una vuelta completa a la isla y aprovechamos para comer allí a la
orilla de Loch Lomond, sin duda un privilegio de sitio.
En la isla aprovechamos también para darnos un baño, algunas más valientes que otras, porque yo mas bien me moje y salí huyendo del frio, pero Ana se quedó allí un rato… claramente no estamos hechas de la misma pasta. Los chicos también se bañaron!
Nos reímos muchísimo ese día y lo pasamos en grande, aquí nos dio por hacernos fotos en una piedra minúscula por eso de no mojarnos, cuando podíamos habernos puesto en la orilla jaja
La vuelta como ya os dije a mi me costó bastante, así que para reponer fuerzas nos fuimos a merendar a una de las cafeterías tan idílicas que hay en Luss, Coach House Coffee Shop and Store, que no falten las tartas, los cafés y los hot chocolates!
Y dimos un
pequeño paseo por la iglesia, el cementerio y los alrededores de Luss antes de
emprender rumbo de vuelta a casa.
Un planazo que estamos deseando repetir para visitar alguna otra isla!
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