El tercer día en Malta, cruzamos a Gozo en uno de los ferries que salían temprano, en el post de organización de un viaje por libre a Malta, tenéis toda la información sobre como cruzar en ferry a Gozo, precios etc.
Una vez en Gozo, nos fuimos a la playa, a darnos un baño, el agua no estaba especialmente caliente pero teníamos mucho antojo de mar. La playa a la que fuimos fue Ramla Beach, de arena fina y bastante amplia y aparcamiento gratuito. No estuvimos mucho más una hora, pero en días de primavera/verano es planazo.
Desde Ramla Beach, subimos en coche a Tal-Mixta Cave, para nosotros 100% recomendable, no solo por la cueva en sí, donde una vez dentro parece sacado de un cuadro, sino por toda la vista que ofrece esa zona desde arriba, de toda la playa y alrededores.
Se aparca cerca de la cueva y luego se accede andando a la misma.
Después de esto
nos acercamos a Marsalforn, donde aunque no íbamos con intención de comer,
hacia tan bueno y vimos varios restaurantes junto al mar que decimos comer, podéis ver en el post de donde comer en Gozo el restaurante al que fuimos y que nos gustó mucho.
El pueblo en si y la “playa” del mismo no nos pareció espectacular ni obligatorio, pero para comer es muy buena opción, y lo mejor está justo fuera del casco urbano, y son sus salinas, aquí si que os recomendamos parar. Se llaman Marsalforn Salt Pans.
El terreno parece de otro planeta y luego además con los reflejos nos pareció un sitio brutal y diferente a otros que vimos en Malta, hay varias zonas en las que parar y disfrutar de las mismas en algunas si se puede pasear y en otras no.
Nuestro siguiente punto fue Wied Il Gharsi, un cañón escondido, al que se accede bajando, muchas, escaleras y que es ideal si quieres darte un baño, nosotros cuando fuimos no hacia tanto calor ya, y apenas había sol así que solo lo vimos, creemos que sino os vais a bañar es prescindible, y además al ser tan chiquito con varios grupos de personas ya estaréis cual “Benidorm”.
Fuimos después recorriendo la costa, y disfrutando de unos paisajes y acantilados preciosos, todos los sitios eran para quedarse horas allí.
Y llegamos por casualidad a este sitio, brutal, se llama la ventana de Wied Il Mielah y es literalmente una ventana al mar. Se accede por unas escaleras y una pasarela estrecha y merece muchísimo la pena.
La penúltima parada del día, también por casualidad fue Ta’ Pinu, una zona religiosa, relativamente reciente, y que nos gusto muchísimo, por la calma del lugar, lo cuidado que esta, todo el paseo esta hecho de mosaico y además al ser la hora del atardecer la luz que tenia era preciosa. No visitamos la iglesia, pero sin duda recomendamos parar aquí a disfrutar de este lugar.
Despues de Ta’Pinu, pusimos rumbo a la capital de Gozo, Victoria, donde hicimos checkin en nuestro hotel The Duke Boutique Hotel, podéis ver todos los detalles del hotel en este post, y nos fuimos a cenar.
Después de cenar, vino otro de los momentos mas espectaculares del día, y fue visitar la Citaddella, amurallada, completamente solos, una pasada, además al llegar frente a la Catedral de Asunción, tenían un hilo musical de fondo y parecía de verdad sacado de una película, al igual que en Rabat, visitarlo por la noche fue un acierto y una experiencia, literalmente única para nosotros dos solos!
Con esto ya si que si terminamos un tercer día muy pero que muy completo.
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